Para poder entender ambos conceptos, vamos a ir poco a poco con cada uno de ellos, comenzaremos con Software libre. Si queremos utilizar una definición rápida y comprensible diríamos que se trata de desarrollar un código que cualquiera pueda reutilizar, sin necesidad de volver a reinventarlo de nuevo.
Si queremos dar una definición más precisa utilizaremos la aportada por la Free Software Foundation en 2009.
- La libertad de ejecutar el programa, para cualquier propósito (libertad 0).
- La libertad de estudiar cómo trabaja el programa, y cambiarlo para que haga lo que usted quiera (libertad 1). El acceso al código fuente es una condición necesaria para ello.
- La libertad de redistribuir copias para que pueda ayudar al prójimo (libertad 2).
- La libertad de mejorar el programa y publicar sus mejoras, y versiones modificadas en general, para que se beneficie toda la comunidad (libertad 3). El acceso al código fuente es una condición necesaria.
Por tanto el software libre ofrece al usuario cuatro libertades: libertad de uso, de estudio y modificación, de distribución, y de redistribución de las versiones modificadas.
Una vez conocido qué es el software libre, pasaremos a mostrar qué es el hardware libre. Para empezar, tenemos malas noticias, el término es relativamente nuevo y no se ha llegado a un consenso en la definición. Igual que en el caso anterior daremos una versión rápida y asequible: dispositivos cuyas especificaciones y diagramas son de acceso público. Para entenderlo mejor, dos ejemplos: Impresoras 3D y Arduino. Cualquier persona puede acceder a estos dispositivos, utilizarlos, mejorarlos y mostrar su nuevo diseño de forma libre.
En ambos casos Open Science Cambre, mostrará ejemplos de software y hardware libre, pero con una ventaja añadida: tendremos al desarrollador del producto frente a nosotros, conoceremos el funcionamiento del producto, le podremos preguntar directamente nuestras dudas y se habrá comenzado una relación entre ambos para poder mejorar de forma conjunta o crear algo nuevo. Seguro que ambos salimos ganando del trueque de conocimientos.
De esta manera mostramos el pasado viernes a niños de 3º, 5º y 6 de primaria una serie de pequeños experimentos que rompieron mitos para ellos como fue el enseñarles que el papel puede arder sin consumirse o que no solo la NASA lanza cohetes. Rebumbiolab busca acercar conceptos básicos y simples que fundamentan la ciencia y explican el mundo que nos rodea a los más pequeños, todo de manera sencilla y atractiva. De esta manera buscamos fomentar la curiosidad e ilusión, haciendo ver a los demás que hasta las cosas más pequeñas aparentemente inexplicables tienen un fundamento (en muchas ocasiones más simple de lo esperado) y demostrándoles no solo que existe cierta magia en la ciencia, sino que existe mucha ciencia en la magia.
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